(Sobre un artículo publicado en La Tribuna el 30.1.2007 de D. Antonio Pérez Henares)
Dice D. Antonio que la propuesta del Sr. Barreda de aumentar un diputado por la circunscripción de Guadalajara es una cuestión de justicia, por el aumento de población en esa provincia y la postura del los populares en contra solo puede ser visto desde la óptica de la conveniencia política. Por ello todo lo que no sea apoyar la propuesta del Presidente es un insulto, un agravio y una injusticia hacia su provincia. Tilda de flamante al Estatuto aprobado por la unanimidad de los dos únicos (la cursiva es mía) partidos políticos de la Región, cuando su grandeza es la falta de conocimiento y participación de la sociedad civil y de todas las organizaciones sociales y políticas de Castilla La Mancha. Precisamente es la falta de una profundización en la democracia la que hace que el Sr. Barreda se quede en un aumento de un diputado y no asuma una verdadera reforma electoral en nuestra comunidad.
Y es que el artículo empieza bien, cuando afirma que <
Pero hay más, estamos en el Parlamento con menos representación respecto al número de habitantes sobre los que deben legislar, como ejemplo cercano tenemos el de Extremadura.
¿Cómo aplicar ese principio fundamental de un/a ciudadano/a, un voto?, pues sería sencillo si se estableciera la circunscripción electoral para las elecciones al Parlamento Regional la totalidad de la Comunidad Autónoma, así todos los votos serían contabilizados por igual.
Resumiendo, si el Sr. Presidente quiere democratizar la Institución con el aumento de un diputado por Guadalajara debido al aumento de población, estaríamos en la situación de que debería aplicar el mismo criterio en la provincia de Toledo debido al mismo razonamiento. ¿Por qué se obvia el caso de Toledo?